Benigno Varillas publicó una docena de artículos en el dominical LaRevista del diario El Mundo en la etapa que fue dirigido por Gumersindo de la Fuente. He aquí uno de ellos:
LA REVISTA
Domingo, 21 de enero de 1996. AÑO VIII NUMERO 2
Por Benigno Varillas.
Hace tiempo que todos los tejados españoles orientados al sur deberían ser inmensos colectores solares que nos proporcionaran agua caliente a precios irrisorios. No se hace, dicen, porque los precios de los paneles y de la instalación para captar la energía solar no son competitivos. Y no lo son porque no se fabrican de forma masiva. Es un círculo vicioso que solamente el Estado, con una política decidida, podría haber roto.
Estas instalaciones serían muy rentables si se incluyeran, de forma obligatoria, en las construcciones de nuevos edificios. Si al hacer la cubierta y la fontanería de las casas se colocara este sistema, los precios de instalación serían muy competitivos y, por tanto, el aprovechamiento de esta fuente de energía gratuita sería un gran ahorro para los usuarios.
El Gobierno de Adolfo Suárez inició esta andadura en 1976, cuando el coste del petróleo obligaba a ser más imaginativo.
Sin embargo, en cuanto el barril bajó de precio, los gobiernos posteriores no se volvieron a acordar de que el sol es nuestra primera industria nacional, por el turismo, y podría serlo aún más con una inteligente política de construcción de sistemas para captar energía solar. Luego diremos que tenemos déficit por la factura del petróleo, contaminación por las centrales térmicas y nucleares y que nos es imposible afrontar nuestros compromisos internacionales para luchar contra el cambio climático.